Tengo un bló

Tengo un bló
Tmeo, la mejor revista de humor

lunes, 31 de mayo de 2010

Bodas de oro

Ayer, 30 de mayo, mis suegros cumplían su 50º aniversario de boda. Toda una vida. Así que el sábado tuvimos celebración por todo lo alto. Mi mitad y sus hermanos llevaban muchos meses planificando este día lleno de sorpresas. Tiene mérito, porque en esta familia llevar algo en secreto es muuuuy difícil. Son un radiopatio familiar. Aparecemos todos al mediodía por casa de los novios con el coche lleno de cintas de colores y les recibimos en el portal entre aplausos, vivas, risas y besos. Ya que mi mitad llevaba a los novios, nos "equivocamos" de camino al restaurante para que el resto prepare con tiempo el recibimiento. Como son muy mediterráneos, traca de petardos y lluvia de arroz y pétalos de rosa.

Mi mitad tiene un amigo de la infancia que es todo un artista y hace espectáculos de transformismo. Un lujazo de actuación. Estaba preparado para salir mientras todos se acomodaban en la mesa. Así que suena la salve rociera y aparece Rocío Jurado (que nadie piense en fenómenos del más allá, que es de un poquito más cerca) Cara de sorpresa de los novios, que era para verlos.




Mi suegro decía que él no se volvía a casar, que ya lo estaba, así que Rocío bis los sacó al escenario y los casó. Eso sí que es digno de verse, que te case la Rocío, y que se quede a comer (Y que me robe los calamares del plato). Y empezaron a llegar los regalos de las manos de las nietas pequeñas. Todo muy emotivo y auténtico sorpresón, lo cual lo hace aún más emotivo si cabe.

Salió un día redondo. Todo el mundo contento, y los novios los que más, que era el objetivo. Alegría, baile, la niña más pequeña fascinada con los bailes del artista, que no perdía ripio y ahora imita por todos los rincones. Cena en grupo...Un precioso día de aniversario.

viernes, 28 de mayo de 2010

Cuitas vecinales

Ayer estaba como los franceses, comiendo a eso de las 12 por culpa de los cabrones de mis jefes, y es que ayer me entraron ganas de pegarle fuego a la empresa con ellos dentro, pero esa es otra historia, cuando suena el timbre de esta mansión, y como el mayordomo tenía el día libre, fui a abrir en persona. Me encuentro con la vecina pedigüeña (esa que pide huevos, aceite, sal, billetes de 20 leuros, etc). La vecina pedigüeña, que vive junto a su pareja, una niña de 3 años y un sinfín de animalejos en un piso alquilado, que hace meses que no paga, está haciendo el traslado de sus pertenencias a otro domicilio. Estos simpáticos vecinos, además, desde el primer día que llegaron, utilizaron el espacio de los buzones, al lado de la escalera, para dejar todas las mierdas que les sobraban en casa como si fuera terreno propio. Acumularon durante dos años, sillitas de paseo de la niña, triciclos, motos de juguete, sillas para coches, cascos de ciclomotor, cubos, etc. Todo ello cubierto con una gruesa capa de polvo y que jamás tocamos porque no es nuestro.

Asi que llega la vecina y me pregunta a ver si sabemos algo de dónde han ido a parar sus pertenencias. Abandonadas, pero pertenencias. Y yo le manifiesto que creía que se las había llevado en el traslado y que no tengo ni puta idea, porque si no lo he tocado en dos años, no lo iba a hacer ahora (Aunque ganas de desescombrar nunca me faltaron). Que los moros del piso de abajo también están tirando cosas de su piso y puede que en el furor arrojadizo se hayan deshecho de tanta mierda. La vecina quería aprovechar la sillita para el nuevo bebé. Así que le digo que hable con ellos y le cierro la puerta, cosa rara porque soy una tía muy simpática, pero me toca los cojones sobremanera que venga a pedirme explicaciones, con una sonrisa, pero las pide, sobre sus bienes povorientos abandonados durante años.

Vivo en un cómic de Ibáñez ¡Socorro!

El colmo es que bajo para largarme a currar y pillar aparcamiento, que no veas como está aquello e atrapar un hueco para el coche, y por cierto ya me lo han vuelto a rayar, me cago en la madre que parió a los hijoputas que no miran cuando desaparcan, menuda raya me han hecho en la parte trasera del vehículo, su puta madre, cuando aparece el gitano de enfrente, a la sazón señor Cuesta de ésta nuestra comunidad y me dice que le diga a mi mitad (pues es la propietaria de este piso) que a ver si ella escribe una convocatoria de reunión anual ordinaria para que él cuelgue el muerto de la administración de la casa a otro. Yo pongo mi sonrisa de conejo más beatífica y le digo que hablaré con ella, mientras pienso dos cosas: Primero que menudo cabronazo, que quita los carteles que pongo yo para que la gente tenga cuidado para no manchar la escalera, cosa que les jode, porque, al contrario que Atila, estos cerdos sí que hacen pasar la hierba a su paso, ya que plantan toda clase de porquerías cuando las tiran al suelo, y segundo, que ya le vale, al "administrador" que si tenemos planta baja y tres pisos, desde hace meses subimos las escaleras con luz intermitente por la noche: Un piso no tiene luz y el otro sí, y se repite. Por lo menos, el muy vago podía poner las bombillas, porque que haya luz lo intentan: Pulsan insistente y repetidamente el botón de la luz, y por mucho que pulsen, si la bombilla está fundida, no se va a iluminar por milagro. Qué bonito día el jueves. Y luego me preguntan por qué soy tan misántropa.

jueves, 27 de mayo de 2010

mi tía Patty y el domund

Mi tía Patty, cuando era una mocosa, acudía al colegio de monjas cercano para realizar sus estudios primarios. Como todos los colegios religiosos de la época, allá por los cincuenta, se dedicaban a cotillear en la vida privada de las familias de sus alumn@s, a adoctrinarlos y a colocarles una hucha con forma de cabeza de negrito con brecha (hendidura) en la cabeza para la pasta. Era la recolección anual del Domund, algo que se sacaron para ir a bautizar a pobres infantes del tercer mundo. Las monjas, además, tenían la fea y asquerosa costumbre de premiar a quien sacara más, lo cual representaba una encarnizada lucha desigual entre las pobretonas del barrio y las niñas bien que vivían en "chaleses". Sobra decir que mi tía Patty estaba entre las primeras, y es que la familia de mi padre, por aquella época constaba de un pobre maestro de escuela, su hacendosa esposa y su extensa prole, entonces compuesta de nueve vástagos.


Tía Patty, que otra cosa no, pero tiene un empeño vital en llevar adelante sus determinaciones, decidió que esta vez iba a sacar pasta costara lo que costara, que ya valía de que las niñas ricas habituales se llevaran todos os agasajos. Después de sablear a sus hermanos mayores, que algo le daban en forma de calderilla, y de patearse el vecindario para sacar monedas mohosas y algún que otro botón, decidió ir a las casas de los vecinos de delante. Pensó que el señor de la óptica, que es un señor tan simpático y tan bien vestido, algo le dará. Y efectivamente, el señor con un acento centroeuropeo energético y repoblado de erres sacó un billetazo y exclamó al tiempo que introducía el billete en la cabeza del negrito. "Cómo, no, porr esta vecina tan simpática".

A la hora de la comida, mi abuelo, que era un señor de profundas ideas católicas, inquiere a su retoño la marcha de la recaudación, y la niña le suelta alegremente que ha ido donde el señor X y le ha sacado un billetazo. Mi abuelo suelta la cuchara y se queda ojiplático y exclama:

-¡Oh, no!- La niña no entiende la reacción, y mi abuelo, maestro a fin de cuentas le dice:
-Patty, no puedes pedirle dinero al señor X para bautizar niños.
-¿Por qué no?
-Pues porque el señor X no es cristiano. Su religión es otra.
-No lo entiendo
-Tú pides ayuda para cristianizar niños, pero el señor X es judío, y aunque haya sido tan amable, seguro que le has molestado.

Patty, que era muy niña, descubrió con sorpresa que no todo el mundo en aquella ciudad tan gris y uniformada perteneceía a la única religión que conocía, hasta ese momento.

martes, 25 de mayo de 2010

Anguita en TVE

Julio Anguita participó en el programa 59 segundos. Merece la pena escucharle porque es claro hablando. Dos cuestiones de actualidad.



Milesker, Neska.

lunes, 24 de mayo de 2010

Pasajes de la biblia: Naviera Noé e hijos S.L.

La biblia cuanta en el génesis que desde Adán y Eva, todo el mundo de la época acostumbraba a tener los hijos a las tardías edades comprehendidas entre los ciento ochenta y los quientos años. Para que vengan ahora diciendo que la maternidad se está retardando. Cuando el mundo se estaba poblando de paisanaje, vivía en la zona un tataranieto de Adán y Eva que se llamaba Noé y tenía tres hijos, Sem, Cam y Jafet.

Un buen día Jehová se mosqueó con los humanos, a los que había hecho a su imagen y semejanza, a algunos más que a otros, y decidió cepillárselos. Pero resulta que, por lo visto, Noé era un buen chaval, justo y honrado, así que Jehová le dijo que se construyera un barco. Le dio los planos, las medidas, la dirección del Ikea y un casco de obrero, porque menudos son los delegados de prevención de riesgos laborales. Le ordenó que embarcaran en la barcaza él, su mujer, sus hijos y sus nueras y luego que él haría llegar a todo tipo de animales en parejas macho-hembra, para que del amor del barco de vacaciones en el mar, surgieran nuevas criaturas con la que luego repoblar la zona.

Y Jehová dió por comenzada la fiesta de la espuma y abrió todos los grifos durante cuarenta días y cuarenta noches. Se supone que todo el mundo, excepto los peces, se ahogó, así que el agua tenía que estar llena de cadáveres para alegría de escualos y pirañicas. Con el tiempo, el nivel del agua comenzó a bajar y el barco del capitan Stubbing encalló en el monte Ararat, actualmente Armenia, creo. Noé soltó un cuervo y el bicho emigró a la torre de Londres, parece ser. Como no volvía, soltó una paloma, se supone que porque estaba hasta los cojones de que le cagara por toda el arca. Y el bicho inmundo volvió con un ramico de olivo, en vez de haber vuelto con bocadillos de jamón, que sería más celebrado. Así que Noé ya no esperó más y sacó la pasarela de desembarque. Jehová le dijo que practicaran ellos y los animales las matemáticas del sexo, y es que la iglesia sólo piensa en el sexo como procreación y para cepillarse infantes.

Noé y algunos de sus animales en el arca

Jehová prometió que ya no se dedicaría a jugar al Titánic con su creación. Noé decidió ponerse a sembrar y puso hasta una viña. Tanto es así que con la primera cosecha de vid se agarró tal cogorza que deja en nada las melopeas de la Massiel.

Los hijos de Noé, Sem, Cam y Jafet tuvieron una descendencia tan dispar que se dice que fueron los padres de las tes razas humanas de la tierra, cosa que no se explica, porque si Jehová se cargó al resto del mundo no cuadra, a no ser, como siempre, que los judíos, ya que el libro es suyo, sólo se refieran a su entorno. Sem fundó a los semitas, y aunque el Ave Turuta se enfade, tan semitas son los hebreos como los árabes de la zona. Cam tiró para África y engendró a los negricos, y Jafet, se supone que a los eurpeos. Entonces mi pregunta es: ¿Y a los asiáticos y a los amerindios quién los parió? El egocentrismo bíblico es prodigioso.

sábado, 22 de mayo de 2010

La cancioncica del finde

Estaba rescatando cedés viejos y me he encontrado uno de Los Pericos. Conocí la música de los Pericos gracias a un amigo de mi hermano mayor, que es medio argentino y nos traía cosas de Los fabulosos cádillacs, los calzones rotos, etc. Muy buenos grupos, muy buena música, que nos llega con cuentagotas. Seguro que la canción que os dejo os suena a Gardel.

viernes, 21 de mayo de 2010

Despejen la calle

Me pasé muchos años trabajando los fines de semana en instalaciones deportivas municipales. Había una en un barrio con canchas de fútbol sala y piscina. Los domingos por la mañana aquello bullía de gente. A pesar de que relativamente cerca de la instalación hay un par de aparcamientos gratuítos, tooodo el mundo acababa aparcando delante de las instalaciones, a pesar de la línea amarilla que lo prohibía, y es que ya se sabe, que si vas a hacer deporte, dejar el coche a 200 metros de la puerta te deja exhaust@. Hay que aparcar al lado.


El diablo sobre ruedas

Por este motivo, por la falta de urbanidad de los perezosos domingueros, los pitufos (la policía municipal) aparecían invariablemente a media mañana para desatascar la calle con grúa incluída y talonaro sancionador en ristre, aunque para ello, los urbanos no tuvieran otra ocurrencia que aparcar el coche patrulla encima del paso de cebra, hecho por el cual un amigo uniformado de la infancia ya no me habla y es que le afeé el hecho del estacionamiento sobre el paso. En un ataque totalmente anárquico de los míos, y después de hablarlo con el compañero de turno de aquél día, agarré el micrófono de megafonía y anuncié: "Atención, a quienes han aparcado el coche delante del polideportivo, la grúa se los está llevando". En tres minutos teníamos desfilando por la puerta de la entrada a un montón de deportistas vestidos (o desnudos, por estar en la piscina) de manera estrafalaria y con las llaves de contacto en la mano para sacar sus vehículos.

Eso sí que era eficacia para despejar la calle, y no coche por coche y multa por multa.

miércoles, 19 de mayo de 2010

Le basque bondissant

Me han preguntado muchas veces por qué se llama mi blog "la basque bondissante" (la vasca saltarina). A muchos les sonará a línea de aurobuses, pero este curioso nombre perteneció a un tenista de los años veinte y treinta, el labortano Jean Borotra.

Jean Borotra en uno de sus saltos con txapela

Jean Borotra nació en un pueblecico aledaño a Baiona, Laburdi, en 1898. Como todos los chavales de esta zona, la manera más habitual de divertirse era jugando a la pelota vasca en el frontón. Nada más terminada la cruel primera guerra mundial, el joven Borotra es llamado a hacer el servicio militar. Allá conocerá el tenis. Resulta que entre guardias y desfiles y sacarle punta a la bayoneta, Borotra se pasaba el día con la raqueta en la mano y no lo hacía del todo mal. Nadie le había dicho jamás como se jugaba al tenis, así que aplicaba su técnica de frontón. Siempre en el fondo de la pista, sin subir jamás y sin dar reveses. Sólamente lanzaba contundentes "drives" cambiando la raqueta de mano, como si fuera la pala de madera de frontón. Un buen día, un entrenador alemán que lo vió, decidió enseñarle a sacar rendimiento a su talento natural. En tres años pasa a ser parte de lo mejorcico del mundo en tenis.

En 1922 gana el campeonato del mundo junto a su compatriota Henri Cochet, y desde entonces su carrera sube como la espuma. 1924 es su año. Derrota al archiconocido René, el cocodrilo, Lacoste en el campeonato de Francia (torneo que luego pasaría a llamarse Roland Garrós) en la modalidad individual, y con él, consiguen también imponerse en la de dobles. Se lleva el torneo de Wimbledon y consigue la medalla de bronce de los Juegos Olímpicos celebrados en París el mismo año.

Borotra con Queen Mary en Wimbledon

Borotra, debido a su agilidad y a los botes que da contínuamente durante su juego alegre y vistoso recibe aquel año el apelativo con el que se le conocerá "le basque bondissant" (El vasco saltarín) Las fotos de la época nos reproducen a un Borotra en el aire dándole a la bola y siempre con una txapela encasquetada en la sesera.

Logo de la compañía de buses bayoneses

En 1925 caen contra los invencibles yankees en la final de la copa Davis, pero demuestran una gran fuerza. Tanto que los cuatro tenistas franceses (Borotra, Lacoste, Cochet y Brugnon) serían conocidos como los cuatro mosqueteros.

Los cuatro mosqueteros en 1927: Jacques Brugnon, Henri Cochet, René Lacoste y Borotra

En 1926 vuelve a llevarse la ensaladera de Wimbledon, aunque en esa época Cochet se consolida como tenista más completo. Hasta 1933 en que Borotra decide cambiar la política por el deporte, al contrario que Lacoste, que se dedica a la confección de ropa deportiva, consigue 6 copas Davis consecutivas y otro título de Roland Garrós. A partir de este año, Borotra sólo jugará en la modalidad de dobles.

En 1940, año en que el III Reich ocupa una mitad de Francia, Borotra, miembro del PSF (Partido Social Francés) se convierte en ministro de deportes del régimen de Vichy. En 1942 lo detiene la Gestapo y lo encierra primero en un campo de concentración en Alemania y luego en un castillo austríaco, donde iban a parar los prisioneros de cierto renombre. Cuando acaba la guerra, vuelve a su casa, y sigue jugando al tenis en dobles. Tanto es así que en 1947, con 49 años aún jugó con Francia para la copa Davis, y consiguió su último título a los 51 cuando se llevó el torneo inglés indoor.

Borotra fue un tenista longevo que vovió a vivir a su Laburdi natal y allá falleció en 1994 a los 96 años en el pueblecico de Arbona.

lunes, 17 de mayo de 2010

Sitges, platja de Sant Sebastià

A pesar de que el buen tiempo no acaba de entrar.-A ver esta semana- salimos a dar una vuelta por Sitges, que es un pueblo costero muy agradable. Resulta que Sitges y Donostia, que tienen algunas cosas en común, han decidido hermanarse de una manera peculiar. Ya que la playa más oriental del pueblo catalán se denomina platja de Sant Sebastià, decidieron colocarle una plaquita y una unidad de la famosa barandilla donostiarra. La plaquita bien merece un "eravili desagun eusquera" (Husemos el eusquera) porque tiene un par de faltas de "horticultura" garrafales. La foto no es demasiado buena, porque está tomada con el móvil.


Dice: "San Sebastián y Sitges, dos ciudades de zine enamorada del mar y de la cultura" En euskara no existe la "c" como tal, y enamorada está en singular. El alcalde de Donostia, no, pero el niñotrepa concejal de turismo (Chaval al que conozco) habla muy bien euskara, ya les podía haber dicho algo.


Ahí tenéis el cachico de barandilla donostiarra en la platja de Sant Sebastià de Sitges.

sábado, 15 de mayo de 2010

Nada cambia

Este es el país del inmovilismo. No es que Garzón me caiga demasiado bien, porque ha hecho cosas deplorables y se ha aprovechado de su cargo de juez instructor para catapultarse a la fama. A los intocables les gustaba ésto, porque era su perro de presa, pero cuando decidió restituír la memoria de aquellos que perdieron la guerra y encima no tuvieron derechos durante 40 años, y otros 30 de "transición", ya no lo soportaron y lo ihnabilitaron. Así que el juez cierraperiódicos topó con los intocables.

Es que en este país, los de siempre no han dejado de mandar. ¡Y a callar!



A ver si os gusta esta cancioncita de Sabina, cuando molaba.

viernes, 14 de mayo de 2010

El cartero vengador

Como ya se sabe que esta crisis "la pagamos entre todos", que nos subirán los impuestos indirectos (El IVA), que nos subirán los directos, que se apaliza a los funcionarios y a los pensionistas, pero que no se tocan los impuestos de patrimonio (recaudar más del que más tiene), ni se tocan los presupuestos de los gorrones reales ni del ejército dentro y fuera de las fronteras, algunos trabajadores de el EPE (Ente Público Empresarial, que es público pero que los funcionarios son especie en extinción, viva el mal, viva el capital! ) ya han comenzado a aplicar vendettas sobre su reducción salarial desde el día uno:


No sé si se aprecia, pero el cartero de mi barrio está leyendo el periódico.

miércoles, 12 de mayo de 2010

Husemos el casteyano, capítulo IX: Escusado de hanimales

Como mucha gente sabe mi desmedida afición por las faltas de "horticultura", Pena Mexicana , de su vista a Graná para asistir a la boda de Candela , se encontró con esto, lo fotografió y me lo envió para que lo guarde en mi archivo personal. Gracias, Pena. :)


martes, 11 de mayo de 2010

Ventajas de llevar el cabello largo

Lunes tampranito. Suena el despertador. Me levanto y preparo café. Mientras sale enciendo el ordenador y leo algo. Me meto en la ducha. Salgo con el albornoz y la toalla enroscada en el pelo y leo otro rato. Me visto y me seco el cabello. Voy a peinarme. Me miro en el pespejo y ¡Oh, no! está ahí, en la parte derecha de mi cuello. ¿Pero es ó no? Me acerco ¡Claro que es! ¡Tengo un chupetón!.


La próxima, me pongo esto.

Y yo que me iba a recoger el pelo porque estoy muy vaga para ir a la peluquería a que me adecenten estos pelos de beatle que llevo. Pues nada, la melena tapará la marca de los dientes de mi mitad. La próxima vez voy a hacer la siesta con un collarín de perro. Lo que me faltaba era no haberme dado cuenta y que todo el mundo me mirara en el curro la "marca de la casa".

lunes, 10 de mayo de 2010

Café

El sábado salimos a probar un restaurante y a pasar una sobremesa estupenda llena de risas, historias, aconteceres y chistes, que es una de las cosas buenas que se pueden hacer con los amigos. Luego el Xispas nos llevó a tomar café al bar donde dice que el camarero es un artista pintando en la crema del café. Y sí que es verdad, porque a mi mitad le hizo éste dibujo:


Sin embargo a mí, me sacó esto:



¿Habré ligado sin proponérmelo? ¿Qué creéis?

sábado, 8 de mayo de 2010

Urtáin

El miércoles leí en el diario local que la compañía teatral Animalario traía su función "Urtáin" hasta Manresa. Así que dadas las ganas que tenía de ver esta representación, corrí en pos de un par de entradas. La puesta en escena me pareció arriesgada y el trabajo de Roberto Álamo como Urtáin, me pareció soberbio. Un espectáculo convulso que cuenta marcha atrás la decadencia y las viejas glorias de un robusto campesino a quien encumbran como figura del boxeo porque en aquella época España buscaba referentes en el mundo a costa de lo que fuera.

Puesta en escena de Urtáin, de Animalario

Siempre he creído que los que decidieron sacar a ese baserritarra (campesino) al que el campo no le interesaba y que quería hacer dinero fácil con las apuestas gracias a su fuerza física, ya fuera como aizkolari (cortando troncos), harrijasotzaile (levantando piedra) ó en las idi probak (arrastre de piedra con bueyes), partieron de la vieja figura de Paulino Uzkudun. Cincuenta años antes que Urtáin, otro campesino guipuzcoano, que también se dedicaba a cortar troncos contra el reloj, fue introducido en las artes del boxeo. Uzkudun llegó, en los años 20 y 30 a ser campeón de Europa. Quizá alguien recordaba este nombre y decidió renovar la leyenda. Agarraron a un baserritarra y le llenaron la cabeza de pajaritos, y éste se prestó al juego creyéndoselo.

Paulino Uzkudun, boxeador de los años 20

Urtáin llevaba como apodo el nombre de su caserío. Algo muy típico de la zona, ser conocido por el nombre de la casa. Como también es muy típico del lugar la querencia por las apuestas. Allá la gente se juega dinerales enormes a base de apostar, de hecho los deportes rurales vascos no tendrían sentido si no fuera por las apuestas. Es la base de su existencia. Quién gana a quién, si es capaz de realizar tal cosa en tanto tiempo....El padre de Urtáin murió en una taberna después de porfiar que era capaz de aguantar el salto de más de quince tipos sobre su pecho. Al dedimosexto, murió reventado. Este hecho lo recoge Anjel Lertxundi para matar a su personaje pendenciero y apostador de "Hamaseigarrenean aidanez" (a la decimosexta al parecer)

Volviendo a José Manuel Ibar hijo, a alguien se le ocurrió que semejante fuerza bruta de la naturaleza, que no conocía las maldades de la gente crápula y parásita de fuera de su entorno rural, podía convertirse en una especie de remedo de Uzkudun. Mismo orígen, resultado parejo. Y empezaron a introducirle en los ambientes pugilísticos. Así fue presentado el tigre de Cestona, más o menos como José Luis Ozores en "el tigre de Chamberí", llegando demasiado mayor y tutelado por caraduras a subirse a los rings y a amañar veladas boxeísticas. Ya que hablamos de "el tigre de Chamberí", no estaría de más recordar que Manuel Summers rodó una película sobre el púgil de Cestona "Urtáin rey de la selva, o así", aunque a veces recuerde tanto a la pajaresestesada "Yo creé a Roque III"

Jose Manuel Ibar, Urtáin

En un año y medio Urtáin pasó a ser el personaje más célebre de España. Ya se sabe que en España se tiene una pasión desmedida por los freakies (Pozí, el Dioni,Belén Esteban...)Las cabezas pensantes de ése régimen descerebrado y medio muerto que era el franquismo, buscaba referentes tanto para el pueblo español como fuera del país. es la época en que Massiel ganó una eurovisión, de la forma que fuera. Urtáin salió en la misma época. Era un bruto noble, un hombretón con la mentalidad de un niño inocente que se dejaba engañar hasta creerse las mentiras. Generoso con la gente de alrededor que no cejaba en invitarse por el púgil y engañado en mil y un negocios que le proponían para que él pusiera la cara de famosete y luego se la partieran, mientras otros huían con su dinero. Todo lo hizo por ganar dinero y vivir dígnamente.

Al final, roto, abandonado, desilusionado y convertido en burla decidió acabar con su vida pocos días antes de que comenzaran las olimpiadas en Barcelona. Se tiró de una azotea porque la vida lo estaba ganando a los puntos. Él decidió que fuera un K.O.

viernes, 7 de mayo de 2010

Maite zaitut (Buen rollico de canción)

Ya que han llegado a mis ojillos miopes y de indefinible color comentarios acerca de lo tristona que resultaba una canción romántica pero evocadora en unos días donde la climatología envuelve la primavera de gris y frío otoñal, he decidido enmendar mi oferta y colgar una canción que es todo alegría. En euskara, claro, mi cultura musical es nativa, pero os escribo la letra y la traducción.






MAITE ZAITUT (Takolo, Pirritx eta Porrotx)

Koloretako ametsak
esna nagoenean
eta ezin loak hartu
gaua iristen denean.

Saltoka hasita hegan
egiteko gogoa,
nire bihotza taupaka
aire lehertzera doa.

Elkarrekin hankaz gora
buruz behera jartzean,
tunelean sartu eta
irrintzika hastean,
bitxiloreekin pultsera
egin dizudanean,
begietara begira
hauxe nahi dizut esan:

Maite zaitut,
maite- maite zaitut;
pila, pila, pila patata tortila!
Maite zaitut. Maite-maite zaitut,
ilargiraino eta buelta maite zaitut

Begietako dizdira,
irribarrea ahoan,
ezin ditut ezkutatu
zu ikusterakoan;
hanka eta eskuetan,
gorputzean, dardara;
nire bihotza taupaka
aire lehertzera doa.

Elkarrekin ortzadarra
margotu dugunean,
ispiluan nire izena
idatzi duzunean,
irratia piztu eta
doinu hau entzutean,
begietara begira
hauxe nahi dizut esan:

Maite zaitut,
maite-maite zaitut;
pila, pila, pila patata tortila!
Maite zaitut.
Maite-maite zaitut,
ilargiraino eta buelta maite zaitut

TE QUIERO

Sueños de colores
cuando estoy despierta
Y no puedo dormir
al llegar la noche

Comienzo a saltar
y siento ganas de volar
Mi corazón latiendo
va a explotar

Cuando juntos
nos ponemos patas arriba
y hacemos el pino
Cuando nos metemos en el túnel
y gritamos
Cuando te hago pulseras de margaritas
Mirándote a los ojos,
esto es lo que te quiero decir:

TE QUIERO,
TE QUIERO TE QUIERO MUCHO
COMO UN MONTÓN DE MONTONES DE TORTILLAS DE PATATA
TE QUIERO
TE QUIERO, TE QUIERO
TE QUIERO HASTA LA LUNA Y VUELTA

no puedo disimular, al verte
El brillo en mis ojos
y la sonrisa en mi boca
Siento temblor en mis piernas,
en mis manos en mi cuerpo

Mi corazón va explotar
con tanta palpitación
Cuando dibujadmos juntos el arco-iris
Cuando escribes mi nombre en el espejo
Al encender la radio
y oir sonar esta canción
Mirándote a los ojos esto es lo que quiero decirte:

TE QUIERO,
TE QUIERO, TE QUIERO MUCHO
COMO UN MONTÓN DE MONTONES DE TORTILLAS DE PATATA
TE QUIERO
TE QUIERO TE QUIERO
HASTA LA LUNA Y VUELTA

miércoles, 5 de mayo de 2010

Nada es para siempre

Antes de que el capitalismo salvaje prectique el "helenismo" contra el resto de los países sureños de la UE, os dejo una bonita canción que siempre me ha puesto la carne de gallina en el corazón:



Esta es la versión original, la del grupo Lugorri, aunque luego Ken zazpi sacara otra. Os cuelgo la letra y la traducción:




Ezer ez da betiko (Nada es para siempre)

Udazken arratsaldetan
iluntzen duenean
hostoak erortzen dira
negar tanten moduan.

Eta parke hutsean,
azken besarkada.
Esan nizun, dama,
ez dela betiko.
Gure artekoa
bukatua dago.

Gogoratzen al dun, neska
hasi ginenean?
parre egiten genuen
elkar begiratzean.
Oroitzen al dun jaietan
mozkortu ginenean?
elkar maitatu genuen
izarren azpian.

Eta parke hutsean
azken besarkada
esan nizun, dama,
ez zela betiko
gure artekoa
bukatua dago.

Udazken arratsaldetan
iluntzen duenean
hostoak erortzen dira
negar tanten moduan.

Eta parke hutsean,
azken besarkada.
Esan nizun, dama,
ez zela betiko.
Gure artekoa
bukatua dago.

Jadanik berandu da
agur esatea,
ez dela erreza,
aitor ezazu neska.
Musuka nazazu
begiak itxita.


Traducción:


En las tardes de otoño
cuando oscurece
caen las hojas
como si fueran gotas de llanto

Y en el parque vacío,
el último abrazo
te dije, dama,
que no era para siempre
lo nuestro ha terminado.

¿Recuerdas cuando nos conocimos?
Reíamos cuando nos mirábamos el uno al otro.
¿Te acuerdas cuando nos emborráchamos en fiestas?
Nos amábamos bajo las estrellas.

Y en el parque vacío,
el último abrazo.
Te dije, dama,
que no era para siempre
lo nuestro ha terminado.
Ahora ya es tarde.
Confiesa, chica,
que no es fácil decir adiós.
Bésame
con los ojos cerrados.

lunes, 3 de mayo de 2010

Historia de unos vaqueros

Hace unas pocas semanas, mi mitad aprovechó una tarde que yo curraba para irse con una de sus hermanas a practicar uno de sus hobbies favoritos (de las dos), que no es otro que pasearse y curiosear por los centros comerciales. A mí tal "deporte" me da quince millones de patadas en las espinillas. Si queréis sulfurarme, y mira que es algo difícil, porque tengo amig@s de décadas que aún no me han visto cabreada ni una vez, sólo tenéis que pasearme -a punta de pistola, eso sí- por una gran superficie comercial.

Cuando llegué a casa al finalizar la tarde, mi mitad, después de horas de conducción de carrito, aún no había vuelto. Cuando lo hizo, me enseñó unos vaqueros que se había comprado que le costaron tirados de precio. Supuestamente eran de su talla, aunque no se los había probado (ya vamos mal). Y, efectivamente, la talla de la etiqueta no se corresponde con la real. Los chinos, por lo visto, no están muy adaptados a las tallas europeas. Así que mi mitad me tiende los pantalones y me dice: "Pruébatelos, que a ti te estarán bien".



Yo veía la prenda demasiado estrecha, pero bueno, y ella decía "si son elásticos" (els collons, noia) Entre eso, mi retención natural de líquidos y que en los días de pago de la mensualidad una se hincha, me sentía como una morcilla embutida en tripa de cerdo. Después de haber cabido en ellos y sentir como aprisionaba mis muslos y la plaza de toros que tengo debajo de la espalda, llegó la hora de cerrar el botón de la cintura. Desde entonces no puedo respirar y mucho menos soltarme los vaqueros que me aprisionan.

Por lo menos, mi único consuelo es que no tuve que pasear horas por el hipermercado, y menos con los vaqueros opresores.